Relatos para El Día de los Muertos

Relatos para El Día de los Muertos




¡Hola, mis lectores! Hoy os traigo un par de relatos que he escribí para el Día de los Muertos, para participar en un concurso de Relatos del Día de Los Muertos de Zenda Libros, los hice en un arrebato de inspiración, espero que os gusten y los disfrutéis. Por desgracia no llegue ni a clasificarme, pero muchas gracias por vuestro apoyo. 

#1 “El Encuentro”.
Hoy es un gran día, pero para mí será mi gran noche, hoy no puedo fallar, hoy no fallaré, la noche es mágica y todo está conmigo, porque el momento ya llegó.

Con el maquillaje a modo de Katrina, doy color a mi cara, con mi hermoso vestido largo verde, doy color a mi cuerpo. Me miro en un espejo y retoco los detalles, es hora de salir. Hoy México es una ciudad llena de color y alegría, hoy honramos a los muertos, hoy podré volver a pasear por la ciudad, pasear por la hermosa México. Recorro sus calles, sus barrios, rememoro los mejores momentos de mi vida… No llega el silencio, pero si la noche… Me siento como Dorothy siguiendo el camino de baldosas amarillas, pero mi senda no es amarillas, sino de hermosas flores de colores, no me llevan a casa, pero si a un gran momento que llevo esperando mucho tiempo.

Camino durante horas y horas, la noche va cayendo sobre mí, mi senda sigue brillando, no la pierdo de vista hasta llegar a mi destino. Es un lugar tan hermoso y melancólico a la vez, todo está lleno de comida y bebida, la fiesta ya ha comenzado… La noche se ilumina con velas y almas al reencuentro de su seres queridos.

Cada vez somos más y más, yo continúo esperando… Muertos y vivos, todos han llegado, menos a quien yo espero, el destino retrasa el momento, sigo esperando mientras veo a todos reuniéndose con sus familiares, que hermosa imagen queda en esta noche.

Allí esta, ya viene, otra vez nos volvemos a ver, pero no como en años anteriores, esta vez no será un reencuentro de una sola noche en el año, esta vez volveremos a estar juntos para siempre. Esta solo, desorientado, quizás asustado, me acerco a él, yo le guiare en su camino a su nuevo él, me busca, me acerco, le toco el hombro, se gira, me mira… “¿Ya es la hora? Le miro, le dedico una de mis más tiernas sonrisas que él siempre adoro, le contesto… “Si, ya es la hora, mi amor. Es hora de dejar México, no para siempre, pero si hasta el próximo dos de noviembre. Ya nada nos volverá a separar, ven conmigo y dejemos este mundo, deja todo atrás. Dame la mano y vámonos”.



#2 Conciertos en la noche
¿Oyes eso? ¿No? ¿Seguro? Pon oído, escucha bien, escucha más allá de la realidad, ¿no lo oyes? Escucha bien, porque la muerte no es el final, que la fiesta no pare, podríamos vivir la música todos los días, porque cuando ya no hay vida, ni hay preocupación, se podría festejar para toda la eternidad, y aunque no podamos todos los días, tenemos la fiesta de los muertos, una de las noches más especiales, en todo el mundo, desde México hasta el fin del mundo. Y es que no solo los vivos echan de menos a los muertos, los muertos también echan de menos a los vivos.

Disfracémonos, pongamos música, bailemos y divirtámonos, porque los que ya no están, hoy si están con nosotros, desde el más allá vienen a celebrar la vida y la muerte.

¿Oye eso? Es Freddie Mercury cantando junto a Bowie y Montserrat Caballé. ¿Oyes eso? ES Jackson cantando al ritmo de “Thriller”, escucha a Kurt Cobain y Elvis Presley, no dejes de escuchar a Morrison y Hendrix, escucha a Lenon y Dolores O’Riordan, todos juntos os cantaran la oda a la vida y la muerte, porque ya no hay motivo para no celebrar, escucha su oda porque te están dando una clara advertencia, vive, porque solo se vive una vez, haz lo que quieras hacer, que ya después festejaremos con los muertos, hoy festejaremos vivos y muerto, porque no podemos perder esta oportunidad.

Como en México en el Día de los muertos, hoy volvemos todos a la vida.

¿Lo oyes ahora? Pues sigue escuchando, porque una vez acabe, pasara mucho tiempo hasta que puedas volver a escucharlos, escuchar esa oda que nos une a todos, vivos y muertos, en la Noche de los Muertos. No hace falta ir a México para vivir esa maravillosa oda, solo tienes que sentarte, escuchar y creer, nada más.


Espero que os gusten y muchas gracias a todos por vuestras visitas. 

"Alegoría de la muerte", Tomás Mondragón.


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